Hamza: “No hay que ser alarmistas pero sí autocríticos para cambiar la dinámica”
El Palma Futsal ha regresado este lunes de las vacaciones con la mirada puesta en el partido del domingo frente al Real Betis. El objetivo es cambiar la dinámica de la última semana de competición con el primer partido del año. El descanso ha venido bien al equipo para desconectar y resetear mentalmente.
El Palma Futsal ha regresado este lunes a los entrenamientos después de cuatro días de descanso para desconectar del deporte y pasar las fiestas navideñas con sus familiares en la medida de lo posible y con todas las precauciones. La mayoría de jugadores se han quedado en Mallorca dado que la situación y el poco tiempo de descanso no invitaba a viajar mientras que aquellos que tienen a sus familiares cerca sí han aprovechado para estar junto a ellos durante varios días. La plantilla al completo se ha presentado a primera hora de la mañana en el Palau Municipal d’Esports de Son Moix para iniciar la semana con una doble sesión de entrenamientos una vez certificado que todos habían superado con éxito los test para evitar posibles contagios. La semana arrancó con fuerza con una primera sesión dividida entre el gimnasio y la pista y la segunda sesión de tarde en la que la pista y el balón fueron los protagonistas.
El equipo regresó con una sonrisa en la cara y con la ambición de aprovechar el cambio de año para dejar atrás el sabor amargo de las derrotas de la última semana de competición de diciembre y afrontar con energías positivas y renovadas el comienzo de año y el primer partido que jugarán el domingo en Sevilla frente al Real Betis. El equipo digirió tres derrotas consecutivas de golpe tras firmar un gran curso hasta la última semana, una situación difícil de asimilar mentalmente y que se asimila diferente con un descanso de por medio para dejar de pensar en el fútbol sala durante unos días. Ahora la plantilla ha vuelto al trabajo con ganas y la ambición de recuperar los resultados y la versión ofrecida durante casi todo el año. Hamza, que es de los pocos que pudo reunirse con la familia en un viaje sorpresa a casa, reconoce que “estos días de vacaciones nos han venido muy bien para liberarnos de las dos derrotas en la liga, liberar los malos pensamientos y la mala dinámica que hemos tenido estas dos últimas jornadas. Venimos con muchas ganas de darle la vuelta a esta dinámica que hemos tenido tan mala y con fuerza para llevarnos la victoria el domingo” admite. En este sentido, el ceutí reconoce que el descanso ha sido importante igual que “tener a la familia cerca muchas veces ayuda mucho en estos momentos, viene bien desconectar, tener el apoyo de la familia y apoyarte en ellos porque mentalmente son un punto muy importante en la carrera de un deportista”.
Sobre la situación del equipo, Hamza apunta que “anímicamente perder dos partidos seguidos y de esa forma, te hace dudar un poco porque en cuanto a juego hemos estado bien pero creo que tuvimos muchas opciones de llevarnos el partido ante Jaén. Psicológicamente hay que cambiar el chip, todos los equipos han tenido rachas, nosotros solo estas derrotas y aún así seguimos líderes. No hay que ser alarmista pero sí hacer autocrítica para salir de esta dinámica. No hay que ser alarmista porque venimos haciendo una muy buena temporada y estos dos partidos no tienen que empañar todo lo que venimos haciendo y tirar el trabajo que hemos hecho. Hay que cambiar la mentalidad y coger fuerzas” y añade que “ganando el domingo nos quitaremos la mala racha y la dinámica y la mentalidad de todos cambiará”.
Test negativos
Todos los jugadores y miembros del cuerpo técnico y del club se sometieron a un control de test de antígenos para confirmar que ninguno había contraído el virus en este período de descanso pese a que todos los profesionales extreman las precauciones en la situación actual fuera del control del club. No ha habido ninguna incidencia y todos se han puesto a entrenar con normalidad una vez certificado que no había ningún positivo en la plantilla. Los servicios médicos del club realizan test cada semana y antes de los partidos para velar por la salud de los jugadores y miembros del club. En este sentido, están resultado de gran ayuda los test que proporciona la LNFS a través de LaLiga para que los clubes de fútbol sala puedan disponer de una amplia cantidad de test para llevar a cabo un control exhaustivo y aumentar al máximo la seguridad tanto para entrenar como para que se disputen los partidos.